miércoles, 2 de mayo de 2012

Malos tratos al anciano
El maltrato al anciano surge como problema social hace pocos años y no porque antes no existiera, sino porque siempre ha sido un problema “oculto”. A veces los ancianos no quieren reconocerse como víctimas de malos tratos por temor a represalias, o al internamiento en instituciones, o simplemente porque no son conscientes de lo que sucede; por otra parte, los familiares o los cuidadores, no van a dar facilidades en la detección por razones obvias.
Las formas más frecuentes de maltrato son:
-negligencia: puede ser:
-física: no satisfacer las necesidades básicas: negación de alimentos, cuidados
higiénicos, vivienda, seguridad y tratamientos médicos.
-emocional: consiste en la negación de afecto, desprecio, aislamiento, incomunicación.
- maltrato físico: golpes, quemaduras, fracturas, administración abusiva de fármacos o tóxicos.
-maltrato psicológico: manipulación, intimidación, amenazas, humillaciones,
chantajes, desprecio, violación de sus derechos impidiéndole tomar decisiones.
-Abuso económico: impedir el uso y control de su dinero, chantaje económico.
-Abuso sexual: cualquier tipo de relación sexual no consentida o cuando la persona no es capaz de dar su consentimiento.

El estudio del maltrato al anciano es relativamente reciente en nuestro país. Además se carece de datos para estimar la magnitud del problema, ya que hay pocos estudios y los que hay no se pueden extrapolar a la población general.

Algunos trabajos muestran que uno de cada cien mayores se siente agredido por sus familiares. Unos 60.000 mayores podrían estar siendo maltratados en el hogar. Otros trabajos realizados muestran que uno de cada cinco casos es denunciado.

De los causantes de malos tratos, el 66% eran los propios cónyuges y el resto,  los hijos mayores. Según los datos, seis de cada diez víctimas son mujeres. También agreden más ellas y suelen ser hijas de la persona a quién cuidan.
Como conclusión, el maltrato a ancianos es un problema grave que no está siendo valorado como se merece. Lo primero, desconocemos desde cuándo existe este problema y por qué se da. Segundo, este desconocimiento y la negación del problema dificultan la prevención y la intervención. Tercero, no disponemos de una legislación específica que proteja a las personas ancianas frente a este problema. Cuarto, los propios ancianos deben conocer el problema del maltrato y los recursos sociales que existen para evitar esto. Y por último, se necesita realizar más esfuerzo en investigación sobre el maltrato al anciano.

Iremos conociendo estos puntos más adelante porque es un problema que nos afecta a todos; ya que podrían ser nuestros abuelos, nuestros padres…. O quién sabe si mañana seremos nosotros mismos los que somos maltratados.




1 comentario:

  1. De como una denuncia por malos tratos se convierte en una venganza.

    http://maltratoalanciano.blogspot.com.es/

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